Dice que sabe volar
con dos alas de papel,
que escribe por no llorar
las heridas del ayer;
que no vuelvan más.
Trabaja de estafador.
Para Maurice uno y uno no son dos.
En la escuela del vivir
siempre matricula de honor.
Viejo trovador,
Siempre de pensión,
nunca paga el mes de abril.
Si aprieta el corazón:
Poema y buen porrón,
Y a sonreír.
¿Quién va a pagar?
Dice cuando sale del bar
y se inventa una canción.
Roba un papel y se dibuja como es:
mujeriego y soñador, socio del placer.
Si saliera de alcalde, todo iría mejor.
Rompería las normas, soltaría al ladrón.
Estaría obligada la imaginación.
Pintaría las calles de color.